Si lees esto tal vez sea porque estás sintiendo que tu cuerpo se anquilosa, le cuesta moverse o tienes tanta tensión que necesitas liberarla. Sientes que te falta flexibilidad y esto se hace sentir más mayor. La flexibilidad y la agilidad son dos conceptos corporales que no precisamente se han de perder durante el avance de los años. Todo depende de cómo tratas a tu cuerpo en el día a día. Te cuento como revertir o aumentar tu flexibilidad. Primero que nada la única forma que conozco de revertir la falta de flexibilidad es estirando, estirando en profundidad. No un estiramiento de 15 minutos superficial, sino uno terapéutico y profundo para que puedas estirar todos los músculos de tu cuerpo. En segundo lugar, una alimentación adecuada para ti y tu sistema osteo-muscular jugará también un papel importante. Esta bien que se reduzca o se elimine los lácteos de origen animal, así como el exceso de carnes rojas y todos aquellos alimentos pro inflamatorios que ademas de generar más inflamación roban calcio a los huesos. Necesitamos aportar los minerales y oligoelemtos necesarios a nuestro organismo con alimentos como las algas, semillas, frutos secos, verdura, fruta, miso sin pasteurizar,etc…. Por otra debemos de movernos ya sea caminando (si es en un espacio de aire sano mejor), hacer ejercicio suave y regular adecuado a tu edad y circunstancias y por último mantener un humor sano. Esto último es de lo más importante. Nuestro cuerpo no está separado de nuestra mente y cuando sentimos emociones sanas también nuestras células, que siempre están escuchando, se siente mejor y con ello nuestros músculos y huesos.
Con estas cuatro bases: estiramiento, movimiento, alimentación y buen humor tenemos asegurado no solo una buena función de nuestro aparato locomotor sino una vida más plena. Recuerda que la vida es movimiento. Cuando empezamos a parar empezamos a perder vida. La buena noticia de esto es que esto ya puede cambiarse y revertirse. ¡Empieza ya!